Los empresarios hoteleros sostienen que hasta antes de marzo y la irrupción de la COVID-19 se esperaba un año “récord en cuanto al volumen de turistas”, pero finalmente la Comunidad Valenciana “se enfrenta a uno de sus veranos más difíciles”
Los datos de la última semana –del 27 de julio al 2 de agosto- muestran que los hoteles de Benidorm han mantenido la ocupación entre un 38% y un 42% de desde que se inició la serie estadística “pos-Covid19”, y con previsiones muy similares que han ido variando constantemente debido al alto índice de cancelaciones y a las reservas de última hora.
El mes que acaba de comenzar “puede estar por debajo de las expectativas que se tenían al principio del verano”, impactados por la falta de turistas británicos.
Así, Hosbec ve con “incredulidad” cómo “el extraordinario esfuerzo que ha hecho toda la sociedad y toda la economía española se ha tirado por la borda en apenas un mes, pillando de nuevo a las autoridades políticas y sanitarias con el pie cambiado y sin reaccionar a tiempo para evitar de nuevo que la situación se descontrolara como está pasando”.
Desde la patronal hotelera argumentan que “la decisión del Gobierno británico se une a la que ya expresaron ayer países también muy importantes para el turismo español y el valenciano en particular como Francia, quien desaconseja viajar por Cataluña, paso obligado para su llegada a la Comunidad Valenciana, Bélgica o Noruega que también ha impuesto la cuarentena obligatoria”.