En Meliá Hotels International los viajes de incentivo representaron el 10% de la facturación MICE (reuniones, incentivos, conferencias y eventos) en 2019, pero la pandemia de coronavirus ha golpeado particularmente al segmento, obligando a buscar fórmulas para sobrevivir. Para reactivar estos viajes, la cadena ha decidido lanzar un programa en el que priman la flexibilidad y la personalización del viaje por parte del usuario final.
Frente a este panorama, Meliá Hotels International se ha planteado cómo hacer viables los viajes de incentivos en la era de la COVID-19 y, desviándose del concepto más tradicional de viaje en grupo organizado, ha dado paso a un programa de incentivos individuales, vinculado al programa de fidelidad MeliáRewards.
“Ofrecer viajes de incentivo individualizados es la mejor opción en épocas en las que viajar en grupo puede estar sujeto a ciertas limitaciones. Por ello, observamos una clara tendencia a que las empresas incluyan estancias en hoteles en la cesta de Navidad para sus empleados o colaboradores, siendo un incentivo muy flexible para la época actual”, sostiene José Miguel Moreno, Global B2B Sales & Marketing Senior Director de Meliá Hotels International.
A través del nuevo programa, la cadena ofrece a las empresas la oportunidad de regalar una estancia a sus clientes, empleados o colaboradores, con la posibilidad de que cada uno de ellos escoja el momento, el destino, el tipo de hotel y la duración.