La caída de casos en España rebaja el temor a que pase a la lista roja

La próxima semana toca una nueva revisión del semáforo COVID de Reino Unido, probablemente el 25 de agosto, con lo que las nuevas reglas de viaje se aplicarían a partir del día 29. En su última actualización el Gobierno británico confirmó a España en la lista ámbar al tiempo que pedía a los viajeros que tuvieran especial “precaución”, dado la “prevalencia el virus y las variantes” en el país. No obstante, la notable caída de los contagios en las últimas semanas ha rebajado los temores de que España pueda pasar a la lista roja: este jueves registraba una incidencia acumulada a catorce días de 360,56 casos, mientras que el pasado 4 de agosto, cuando se produjo la última revisión del semáforo esta ascendía a 633,07.
En los últimos días los viajeros británicos habían mostrado su temor por la posibilidad de que el país pudiera pasar a rojo la próxima semana después de que el NHS Test and Trace del departamento de Sanidad hiciera públicas unas preocupantes cifras: que uno de cada 35 viajeros procedentes de España había dado positivo en COVID-19, según la prensa del país.

Estos datos desataron la alarma entre los turistas, que ya veían a España como el siguiente destino en pasar a la lista negra del Gobierno británico, tal y como ya sucedió semanas atrás con México, lo que obligó a los viajeros que se encontraban allí a regresar anticipadamente para evitar la cuarentena en hoteles

Cabe recordar que los ciudadanos que lleguen al Reino Unido desde un país de situado en la lista roja deben, por ley, reservar una estancia en un hotel de cuarentena durante 10 días, un aislamiento que desde el 12 de agosto saldrá aún más caro, tras aumentar el Gobierno los costes.
Precisamente, el pasado 19 de julio Inglaterra calificó a Francia en la categoría ámbar plus, por lo que a su regreso se debía guardar cuarentena, debido a “la persistencia en el país de los casos de la variante beta”.

Positivos procedentes de los países ámbar
Las actuales restricciones estipulan que todos los ciudadanos que lleguen a Reino Unido deben someterse a un test COVID. Según los datos del NHS Test and Trace, de entre aquellos que procedían de países en ámbar un 1,2% dio positivo.

Entre los destinos favoritos de los británicos en ámbar, los procedentes de España registraron el mayor nivel de contagios, con un 2,9%. Esta cifra ha sido la que ha provocado el temor entre los viajeros a que pase a la lista roja

Entretanto, la tasa de pruebas positivas fue del 1,5% para los turistas procedentes de Grecia y Portugal, mientras que para los que procedían de Alemania y Francia fue inferior al 1%.

La próxima revisión del listado de países de riesgo se producirá la próxima semana y el ministro de Transportes, Grant Shapps, ya ha garantizado que no hará ningún cambio en la lista actual antes de esa fecha. Será entonces cuando se decida finalmente si se imponen más restricciones a España, en base a los últimos datos analizados por el Centro Conjunto de Bioseguridad.